Las cinco etapas de la intimidad: ¡descubre dónde estás!

Julie Alexander 12-10-2023
Julie Alexander

La intimidad es algo más que sexo y alcoba. Es tanto emocional como física. Se dice que la etapa de intimidad comienza desde el principio de una relación y que pueden pasar hasta cinco años hasta llegar a la etapa definitiva del amor. Aunque en una relación pueda parecer que la intimidad empieza a agotarse, los cuidados necesarios y aguantar pueden ser algunas de las formas de afrontarlo.

Algunas personas creen que la intimidad física es temporal y que lo que permanece en última instancia es el vínculo psicológico que da lugar a la unión que las parejas experimentan a largo plazo. Pero el amor y la intimidad pasan por etapas y la intimidad física y emocional están conectadas.

Es innegable que lo físico y lo psicológico están interconectados, y las parejas que disfrutan de intimidad física suelen ser emocionalmente más sólidas y felices.

Las cinco etapas de la intimidad

Pero los lazos afectivos y la intimidad no se consiguen en un solo día, ni siquiera en una semana o un mes. Se trata de un proceso que hay que atravesar, y existen etapas de intimidad en las que te puedes encontrar a lo largo de tu relación. A continuación te presentamos algunas etapas con las que quizá quieras familiarizarte, para saber en qué fase de la intimidad os encontráis tú y tu pareja.

1. Lo primero es el enamoramiento

Este es el dulce y almibarado comienzo de toda relación. Todo son mariposas y sensaciones celestiales. La maravillosa sensación de cercanía, pensar en la pareja, mirar el teléfono cada cinco minutos, charlar por teléfono durante horas y comprar cosas sexys. En esta etapa, la gente se entrega al sexo con frecuencia como prueba de intimidad. A veces el sexo es bueno, y a veces, no está a la altura. ElLos niveles de dopamina se disparan y nada nos sienta mal. Es el principio de la relación, cuando nos ponemos en plan: "Es tan perfecta", "Me voy a casar con él y voy a tener unos hijos preciosos con él", "Tenemos tanto en común, ¡OMG!".

El alto nivel de dopamina hace que el cuerpo anhele el sexo una y otra vez; la euforia es inigualable. El enamoramiento es como una caída libre, y parece que nunca aterrizamos. Esta etapa es todo poesía, de regalar melocotones y romances calientes y pesados al calor de la tarde: es una sensación preciosa.

¿Lo amaba o era sólo lujuria y un emocionante romance de mediana edad?

2. El aterrizaje agridulce

Tras el maravilloso vuelo a través de las emociones celestiales, llega el temido aterrizaje. El humo del sexo incesante y las emociones alegres se despeja para ofrecer una comprensión más profunda de la relación.

Podemos pensar en otras cosas y a menudo nos sorprendemos pensando si todo va bien en nuestra relación, ya que no siempre estamos pensando en nuestra pareja. Aquí es donde empieza la verdadera comprensión de la vida.

En esta etapa, tumbarse en la cama no es tan tentador, ya que la vida tiene que reanudarse, y las parejas empiezan a darse cuenta de ello. Puede que ames a la persona pero, a diferencia de la etapa anterior, te enfadas por algunas cosas que hace. Vemos a nuestras parejas bajo una nueva luz. Puede que haya desavenencias en esta etapa. Es un momento de hacer o deshacer para las relaciones. El aterrizaje puede ser un poco rocoso e inestable, y mucho trabajo.La clave es no rendirse.

En otras palabras, es la etapa del despertar en la que los latidos del corazón empiezan a ralentizarse un poco y hay que levantarse de la cama y pensar en la compra y en las facturas de las que hay que hacerse cargo. Es la etapa en la que puedes descubrir lo compatibles que sois, en todos los sentidos, física y emocionalmente.

Ver también: ¿Cuándo empiezan los chicos a echarte de menos tras una ruptura? 11 posibles escenarios

4. Despertar

En esta fase resurgen viejas emociones, como "casi había olvidado lo guapísima que está vestida con un sari" o "es tan raro, pero me encanta mi rarito". Las primeras fases del romance de monos, seguidas de la toma de conciencia de la persona real con la que estás, pueden asustar a unos cuantos. Algunos pueden huir antes de llegar a esta fase.

Esta etapa consiste en aceptar a la persona, amarla y sentir pasión nostálgica. Es como el enamoramiento, pero con más madurez y responsabilidad.

Resurgir es como la poesía, una película en colores animados, bucear en alta mar o contemplar de verdad las estrellas nocturnas después de mucho tiempo. Es el rejuvenecimiento de la relación en todo su esplendor.

Esta es una etapa maravillosa. En esta etapa de la relación te sientes más seguro, conoces bien a tu pareja y estás dispuesto a reinventar la relación y llevarla adelante. Esta es la etapa en la que a las parejas les encanta explorar más. Viajan juntos, adoptan nuevas aficiones o experimentan juntos en la cocina. A menudo reforman el interior de su casa o incluso piensan en emprender una nueva carrera profesional.Esta es la etapa en la que la relación física ha dado ese vínculo que importa.

5. Amor

La mayoría de las parejas se queman antes de llegar a esta etapa. La luz al final del túnel, el verdadero oasis en un desierto de arena, el poderoso sentimiento de amor es la etapa definitiva de la intimidad. La sensación de amor dichoso es la recompensa, y el sentimiento es generoso porque nos damos las gracias a nosotros mismos (y a nuestras estrellas de la suerte) por haberlo superado todo. "Estoy tan bendecido por tenerla", "Nunca supe lo que era el amor, hasta que...".lo encontré"- estos son los pensamientos que surgen fácilmente en esta etapa.

Ver también: Las 60 peores frases para ligar podrían tener la culpa

En las etapas de la intimidad en una relación, ésta es la etapa en la que el amor realmente florece, cimentando y fortaleciendo la relación con su aura. Lleva tiempo llegar a esta etapa, y cuando las personas llegan a ella, se dan cuenta de la permanencia de una relación. Esta etapa consiste más en tomarse de la mano y apoyar la cabeza de ella en la de él.hombros, pero la intimidad física debe formar parte de esta etapa para garantizar que el vínculo permanezca intacto.

Julie Alexander

Melissa Jones es una terapeuta licenciada y experta en relaciones con más de 10 años de experiencia ayudando a parejas e individuos a descifrar los secretos para relaciones más felices y saludables. Tiene una maestría en terapia matrimonial y familiar y ha trabajado en una variedad de entornos, incluidas clínicas comunitarias de salud mental y práctica privada. A Melissa le apasiona ayudar a las personas a construir conexiones más fuertes con sus parejas y lograr una felicidad duradera en sus relaciones. En su tiempo libre, le gusta leer, practicar yoga y pasar tiempo con sus seres queridos. A través de su blog, Decode Happier, Healthier Relationship, Melissa espera compartir su conocimiento y experiencia con lectores de todo el mundo, ayudándolos a encontrar el amor y la conexión que desean.